Tras haber dedicado gran parte de su vida a estudiar el funcionamiento del poder – llegando a determinar que este se encontraba prácticamente en todas partes – en el primer volumen de Historia de la sexualidad, Michel Foucault indicó que «donde hay poder, hay resistencia». Esto no sólo implica que el poder contiene el germen de su propia respuesta, sino también que la resistencia no es externa al poder; más bien, es su contracara.Porque la resistencia no es la mera oposición al poder de turno. Es más que eso. El solo hecho de que Foucault haya puntualizado que «donde hay poder, hay resistencia» refleja que no siempre es evidente. Así, parte del sentido de este número de ARQ es justamente dar visibilidad a las distintas formas de resistencia que aparecen en la arquitectura.
Quienes lean este número dentro de algunos años podrán recordar este momento no sólo por el estallido social en Chile o las protestas contra el racismo en distintos lugares del mundo, sino también porque este 2020 la humanidad ha debido resistir los embates de la pandemia de COVID-19 encerrándose en sus casas para evitar el peligro del contagio. En estos últimos meses, la arquitectura se ha transformado en nuestra principal herramienta de resistencia sanitaria.
Con el equipo de ARQ en teletrabajo desde mediados de marzo, esta es la primera vez que publicamos una revista sin vernos en persona. Parapetados detrás de la arquitectura, tras meses mirando el mundo a través de una pantalla – sea de computador, teléfono o televisión – muchos apuestan por el reemplazo de los medios físicos e, incluso, la persistencia del teletrabajo tras la pandemia. En ARQ nos resistimos a esas opciones. No sólo extrañamos volver a nuestras oficinas, compartir el café al iniciar las mañanas y conversar sobre arquitectura, sino que también creemos que si bien la pandemia puede golpear a las instituciones, no tiene por qué hacerlas desaparecer. En ese sentido, insistir en publicar este número 105 en papel – sobre todo en un formato con menos color que lo habitual – es una forma de resistir el embate y, de esta forma, demostrar el poder de la revista.(extracto editorial).